Siempre he dicho que si hay una “virtud” que admiro y que no tengo, esa es la constancia, y hoy (cuando digo hoy me refiero también al fin de semana) me he dado cuenta de que otra de mis carencias es la “capacidad organizativa”. Es entonces cuando me descubro asumiendo que quizá sea su ausencia lo que hace que me cueste tanto encontrar hueco para ir al gimnasio o comer sano. Pero ese es otro asunto. Volvamos al tema por el que me siento a escribir estas líneas y que me surge a la salida de los Teatros del Canal después de ver La Tristura, una pieza teatral que recomiendo encarecidamente y que cuenta con una puesta en escena con la que todavía fantaseo.
La dispersión en cambio siempre se me ha dado fetén. Vuelvo a intentarlo. El sábado decidí que lo siguiente sobre lo que escribiría serian libros escritos por mujeres. Aquí tendría que hacer un paréntesis para explicar los motivos que me llevan a tomar esta decisión y que no son otros que una amena y divertida charla entre vinos y amigos pero, sería demasiado largo y todavía tengo que explicar el criterio a la hora de hacer mi lista sin que os durmais.
No será la única entrega sobre escritoras porque he tenido que dejar fuera a algunas de mis novelistas, poetisas y dramaturgas favoritas, hecho del que ya me estoy arrepintiendo. He querido basar esta primera lista en algunos de los últimos libros que he leído firmados por mujeres, lo cual hace que no pueda incluir joyas de Djuna Barnes, Virginia Woolf, las hermanas Brontë, Jane Austen, Agatha Christie, Banana Yoshimoto, Sarah Kane, Rosalía de Castro, Santa Teresa de Jesús, Alfonsina Storni, Anaïs Nin, Emilia Pardo-Bazán…
Cómo ser mujer, de Caitlin Moran
Empiezo con esta autobiografía, probablemente el libro que más he regalado y recomendado durante el 2015 y 2016, plagada de humor e inteligencia. Lo más interesante es sin duda su forma de entender y defender el feminismo, a través de la idea de que todo se basa en el hecho de ser educados unos con otros. El libro recorre los obstáculos que encuentra a lo largo de su vida, analizando las actitudes machistas y prejuicios que a día de hoy tienen tanto hombres como mujeres, basándose en sus experiencias como mujer, feminista e hija de una familia numerosa y proletaria, y lo hace al tiempo que utiliza al menos diez chistes, ironías y/o exageraciones en una de las paginas que tratan la relación con su cuerpo y la comida, su relación con los hombres y la sexualidad, su trabajo, el aborto y la maternidad. No dudes en continuar leyendo si el inicio y recorrido por su más tierna infancia no te acaba de enganchar, por favor ¡aguanta!. Merece la pena.
Solterona. La construcción de una vida propia, de Kate Bolick
Bolick reflexiona sin perder el sentido del humor, sobre la aceptación social de las mujeres que han decidido permanecer solteras y las exigencias sociales que han sometido a las mujeres en los últimos siglos. De fácil lectura, este ejercicio catártico y generoso por parte de su autora también habla de como las obras de otras mujeres como Edna St. Vincent Millay, Maeve Brennan, Edith Wharton, Neith Boyce y Charlotte Perkins Gilman, la ayudaron a apasionarse, a no buscar en los demás sino en ella misma, a sentir y a vivir como una mujer que no depende de juicios ajenos para construir su identidad.
¿Por qué ser feliz cuando puedes ser normal?, de Jeanette Winterson
Impactante autobiografía sobre la infancia y adolescencia de Jeanette Winterson. El titulo cita la pregunta que le hizo su madre, una mujer que había adoptado a una niña con la idea de convertirla en su aliada para la misión religiosa que le tenía destinada, al confesarle ella a la edad de dieciséis años que se había enamorado de otra mujer. Inevitablemente, me viene a la cabeza la historia de Hildegart, aquella niña prodigio de brillante futuro a la que su madre mató cuando sintió que se estaba alejando del proyecto vital que le tenia reservado. La disciplina impartida por la madre de Jeanette i ncluye pistola y noches enteras al raso, y excluye amistades, libros, brazos y besos. Es enternecedor e inspirador descubrir que donde normalmente habría rabia y rencor hay una búsqueda constante de placer y perdón a través del amor y del propio ejercicio que supone este libro. Y que la prohibición derivó en rebeldía productiva y en un instinto de autoconservación que la llevaron hasta la biblioteca del barrio a por novelas y libros que la ayudaron a crecer. Winterson es una escritora alucinante y me siento en el deber de nombrar también Escrito en el cuerpo . Una historia de poco convencionales amores y adulterios, en la que la no sabes si el personaje que narra es hombre o mujer.
¿Cómo debería ser una persona? Una novela desde la vida, de Sheila Heti
Busqué este libro después de leer lo que dijo sobre él Miranda July. Básicamente un “como se hizo”, a través de ficción, no ficción y confusión, de una mujer de treinta años. Reflexionando a través del éxito, la fama, el arte, la amistad y las relaciones de pareja (principalmente las derrotas amorosas). El lenguaje que utiliza es extremadamente sencillo, quizá demasiado. En cualquier, plantea una historia contemporánea y universal para el primer mundo sobre una generación que anda bastante perdida, es narcisista e incluso banal, a la que preocupa más como se relaciona con los demás que como es.
Nada se acaba, de Margaret Atwood
Candidata al Premio Nobel y ganadora del Booker Prize y Premio Príncipe de Asturias de las Letras, entre otros. Comprometida ecologista, feminista y prolífica escritora, entre sus obras no faltan relatos cortos, ciencia-ficción, novela policíaca y poesía. Nada se acaba es una novela ¡bien!, que habla del amor y la trascendencia a través del triángulo formado por el matrimonio de Elizabeth, egoísta y avariciosa, Nate, cobarde, sensible y “acorralado” entre su mujer, amante, madre, hijas… y Lesje, una paleontóloga que se siente excluida y fácilmente prescindible. Cada vértice del triángulo incluye a otro personaje, el fantasma, la intensa, el aburrido. Atwood narra a la perfección l a vulnerabilidad y necesidad de protección del ser humano. Llega a mis manos después de haber leído El cuento de la criada , obra que viaja entre el pasado y el futuro y en la que destaca la crítica social y el tratamiento de la mujer.
Escapada, de Alice Munro
Dejo para el final a esta escritora canadiense y ganadora del Premio Nobel a la que Álmodovar define como “la mejor escritora de relatos en lengua inglesa”. No en vano, Escapada inspira la última película del director. El libro se divide en tres relatos Destino, Pronto y Silencio, en cada uno muestra a su protagonista, Juliet, en diferentes etapas de su vida. En el primero va al encuentra el amor y el desamor; en el segundo y madre de una niña, visita a sus padres ancianos a los que juzga a través de su mirada adulta; en el tercero Juliet será víctima de sus actos anteriores, abandonada y juzgada por su propia hija.
