LA ENSEÑANZA

 

El Adón usa nuestras ruinosas experiencias pasadas para levantar nuestro ministerio. Todos hemos pasados cosas terribles e inexplicables: lo que ayer fue dolor, traumas, depresión y angustia, puede transformarse en la fuerza de cada uno, si permitimos que la sanidad de Yahshua ha Mashíaj nos alcance. Así que ese sufrimiento que estamos pasando hoy, mañana se va a convertir en nuestra arma de guerra más poderosa. Por eso, demos gracias a Elohim en toda tribulación, porque toda desgracia Él transforma en bendición. Nunca soltemos Su mano, aunque no veamos la salida, Él está a nuestro lado y de lo vil, Él sacará lo precioso.

 

La falta de perdón extiende un dominio paralizante sobre nuestras vidas. Nuestra vida espiritual y nuestro crecimiento y madurez espiritual dependen de que tengamos o no un ruaj perdonador. Si tenemos amargura en el corazón, vamos a quedar estancados en nuestro llamamiento y en el propósito de Elohim.

 

Sé que la palabra odio, es una palabra muy fuerte. Pero la falta de perdón tiene su raíz en el odio. Podemos suavizar esta palabra llamándola resentimiento, ardor, enojo... más en realidad su raíz es el odio.

 

Todo el que odia a su hermano es homicida, y ustedes saben que ningún homicida tiene vida eterna permanente en él. Yahanan Alef 3:15

 

La falta de perdón se transforma en odio y el odio en homicidio.

 

Y cuando se pongan de pie para orar, si tienen algo contra alguien, perdónenlo, para que su Padre que está en los cielos también les perdone a ustedes sus ofensas. Mordejai 11:25

 

Entre PERDONAR O NO PERDONAR, sin duda la mejor opción es perdonar. Perdonar es una decisión y no un sentimiento.

 

Después de decidir perdonar y soltar la furia, la rabia y el resentimiento, entonces Elohim obra una paz tan sobrenatural y permite que sintamos que hemos perdonado. Pero si decidimos no perdonar, viviremos en la oscuridad, nuestros pensamientos no tendrán claridad, andaremos en confusión, debilitados, atormentados, torturados y comenzamos a cometer errores, uno tras otro. Un alma llena de enojo y amargura, jamás tendrá pensamientos claros. La falta de perdón es oscuridad:

 

El que dice que está en la luz y odia a su hermano, está en tinieblas todavía. El que ama a su hermano permanece en la luz, y en él no hay tropiezo. Pero el que odia a su hermano está en tinieblas y anda en tinieblas; y no sabe a dónde va, porque las tinieblas le han cegado los ojos. 1 Yahanan 2:9-11

 

Por otro lado, los demás a nuestro alrededor intuyen, disciernen que "algo" está mal en nosotros y eso afecta el medio donde nos movemos y a las personas que nos rodean.

 

 

Debemos Comenzar Primero En La Familia

 

Es demasiado fácil tener falta de perdón dentro de la familia, porque son los que más tiempo están juntos, más se conocen y más se pueden lastimar profundamente unos a otros. Si no resolvemos perdonar dentro de la familia, eso traerá devastación a nuestra vida. Podemos caer en un padecimiento emocional, que puede ir agravándose con el tiempo.

 

Es muy importante reconocer sinceramente que hemos perdonado a nuestros padres. Por allí debemos comenzar. Aún si tuvimos muy malos padres, que prácticamente destruyeron la vida de uno, Elohim está con nosotros para darnos un nuevo comienzo y un nuevo propósito y Él lo va a hacer porque su Palabra está llena de este tipo de promesas. Es dejando todo lo pasado atrás, y entrar en una nueva alianza con nuestro Creador, y eso traerá grandes cambios en nuestra vida.

 

Y ciertamente hoy podemos perdonar y mañana ser nuevamente ofendidos dentro de la misma familia, más aún así, ¡Elohim quiere que perdonemos TODO EL TIEMPO!! Seamos sabios para relacionarnos con los demás y sepamos poner límites si es que la relación con una determinada persona se torna muy difícil. Debemos perdonar todo el tiempo más poner límites.

 

Perdonar es una decisión que tenemos que trabajar día a día. Todos los días debemos perdonar. Tenemos que entrar constantemente en la presencia de Elohim y pedir que nos revele si hay falta de perdón en nuestro corazón y con quién es el problema, y Él lo hará. A veces no nos damos cuenta que hay falta de perdón en nuestro corazón.

 

Si Elohim nos perdonó una gran deuda y nos sacó de un basurero, entonces, estamos obligados a retribuir el perdón que nos dio, para los demás. El perdón en realidad es la mejor venganza en una relación conflictiva, porque no sólo libera a la persona que perdonamos, sino también nos libera PRINCIPALMENTE a nosotros mismos, para que podamos movernos hacia donde Elohim tiene sus planes para nosotros. Y realmente no nos debe interesar que ellos admitan su culpa o no. Muchas veces nunca admiten que han errado, y eso nunca debe detenernos a perdonar, ya que el tiempo ES EL MEJOR REMEDIO, por decirlo de alguna manera y el que va a demostrar donde estaba el error. La justicia de Elohim siempre llega. Estas cosas están mejor explicadas en nuestro estudio CTU 15 - Gracia En La Ley Del Jubileo 02.

 

Elohim estipula en su Palabra el tipo de conducta que desea para nosotros, diciendo a continuación del pasuk de Mordejai:

 

Pero si ustedes no perdonan, tampoco su Padre que está en el cielo les perdonará sus ofensas. Marcos 11:26

 

Y nos  indica:

 

Más bien, sean bondadosos y misericordiosos unos con otros, perdonándose unos a otros, como Elohim también los perdonó a ustedes en el Mashíaj. Efesiyim 4:32

 

Si no perdonamos, nuestra alma enferma quedará en la cárcel.

 

 

"No Puedo Perdonar"

 

Tal vez lo que nos hayan hecho haya sido terrible, devastador, horrendo. No creo que haya un ser viviente que no haya sufrido en este mundo.

 

A veces sentimos que el daño que nos hicieron es demasiado grande, hasta que conocemos el caso de otras personas, que les tocó muchísimo más difícil que a nosotros. Pero la Palabra no nos da opciones, y tampoco nos pide comparaciones. Sólo ordena que perdonemos, y tiene que ser nuestra confianza completa en Elohim que Él está llevando nuestra vida. Cuando perdonamos, bendecimos. Cuando bendecimos, eliminamos una maldición. Es más benéfico para nosotros que para la otra parte, aunque pueda parecer que estamos "agachando la cabeza", o "cediendo a la presión". EN VERDAD, ESTAMOS MANTENIENDO NUESTRA SANIDAD ESPIRITUAL.

 

Tenemos que aprender a refugiarnos completamente en Él. Toda la vida habrá problemas, luchas, desilusiones, pesares... esto es inevitable, y no podemos morir de amargura las veces que alguien nos ofende.

 

Si no aprendemos a perdonar rápido, se formarán en nuestro corazón capas sobre capas de resentimiento, hasta formarse una raíz tan gruesa de amargura que será literalmente imposible deshacernos de ella. Por eso Elohim nos puso la oración, para tomar fuerzas, recibir shalom y avanzar, para que nuestro Elohim nos imparta Su consuelo y Su sanidad, aunque no veamos la salida. Y la Palabra, como lumbrera, nos indica cuál debe ser nuestra conducta y lo que debemos hacer cuando tenemos conflictos. Con cada victoria, sabremos y conoceremos más a nuestro Elohim y tendremos la certeza de que podemos descansar en Él. Si tenemos una relación de intimidad con Yahweh, jamás nos sentiremos solos, aunque físicamente estemos solos.

 

Perdonar es una decisión, lo sintamos o no, y cuando uno toma la decisión de perdonar, Elohim bendice esa decisión y derrama sobrenaturalmente el perdón, el sosiego y la tranquilidad en nuestro corazón.

 

 

 

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EL MANÁ

 

No se acuerden de las cosas pasadas; ni consideren las cosas antiguas. Yo voy a hacer algo nuevo; pronto sucederá, de momento lo percibirán: Voy a abrir un camino por el desierto, ríos en el sequedal. YeshaYah 43:18-19

 

Perdónanos nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. MattiYah 6:2

 

No juzguen, y no los juzgarán a ustedes. No condenen, y no los condenarán a ustedes. Perdonen, y se les perdonará. Luka 6:37

 

 

LA ARMADURA

 

Ahora me fortalezco con el gran poder de Yahshua Ha Mashiaj y me coloco toda la armadura de nuestro Elohim, para  hacer frente a todas las artimañas de haSatán.

 

Me ciño con el Cinturón de la Verdad, me protejo con la Coraza de Justicia, y calzo mis pies con el ánimo de proclamar la Besorah de la Paz. Tomo el Escudo de la Fe con el que apagaré todos los dardos de fuego del maligno. Tomo también el Casco de Salvación y la Espada del Ruaj, que es la Palabra de Elohim. Como guerrero enfrentaré las huestes del maligno recuperar todo lo que perdí yo, y mis antepasados, para cortar con estas maldiciones que se arrastran en mi familia, para que mis hijos no las sufran y sirvan plenamente a Yahweh.

 

 

LA ORACIÓN

 

Padre Santo: Ayúdame a ser una persona que perdona y muéstrame cuando no lo soy. Te entrego mi alma por completo para que busques en ella, en todos sus huecos, y me muestres indicio de falta de perdón. Y entonces dame fuerzas, te suplico, para que yo pueda confesarte mi pecado.

 

No permitas que se aniden en mi alma la amargura, el enojo, el resentimiento, la envidia, suplico que me ayudes a mantenerme libre de esos sentimientos y ante la menor señal, que yo pueda saberlo para desalojarlos de mi ser.

 

Hazme comprender completamente tu perdón hacia mí, para que yo pueda también perdonar la falta en otros; nadie me puede ofender a mí más de lo que ofendieron a tu Hijo Yahshua.

 

Tú sabes la historia completa de cada acontecimiento que me lastimó, a Ti Padre te toca el juzgar. No me importa si ellos creen que tienen la razón. No me importa si ellos nunca pidieron una disculpa. No me importa que ellos se retracten o se corrijan. Perdono a cada uno de ellos para que sean liberados de toda atadura, y para liberarme a mí mismo también. Y si debo pedir perdón, que no me niegue a hacerlo.

 

Y si alguna vez me he quejado de Ti y te he culpado de mi desgracia o de mi suerte, o de que no me escuchas o que me has abandonado, te suplico ahora que me perdones.

 

Padre Santo: necesito perdonar a todos y cada uno de los que me han dañado. Por más que el daño que me han hecho haya sido irreparable, yo necesito perdonar, necesito liberarme de tanto resentimiento. Clamo a ti ahora que me ayudes a perdonar por completo, suplico ayuda para poder perdonar a todos los que me hirieron.

 

Padre Eterno: quiero perdonar a mis padres cualquier ofensa que me hayan hecho. Decido perdonarlos completamente y bendecirlos. Quiero perdonar a mis familiares cualquier ofensa que me hayan hecho. Decido perdonarlos completamente y bendecirlos. Quiero perdonar a mis amigos y conocidos cualquier ofensa que me hayan hecho. Decido perdonarlos completamente y bendecirlos.

 

(Nombre a la persona que desea perdonar): Te perdono cualquier cosa que hiciste y me dolió. Te perdono y te bendigo y ruego el favor y la bendición del Altísimo sobre ti. (Aquí puede decirle a Elohim todo lo que esa persona le hizo, lo mal que usted se sintió, y decirle que le perdona, aún si esa persona ya no está viva).

 

Abba Kadosh, también pongo delante de Ti las situaciones de conflicto con la parentela y te ruego que derribes toda muralla de alejamiento, distancia, dolor que se ha levantado entre nosotros, para que podamos perdonarnos los unos a los otros.

 

Padre Eterno, suplico una vez más que la falta de perdón nunca se anide en mi corazón. En este día resuelvo soltar esos recuerdos dolorosos, resuelvo soltar la ira, el enojo y la amargura. Perdono, en este momento, en obediencia a tu Palabra, sin importar si lo siento o no. Perdono cada ofensa pasada y pido tu Ruaj como bálsamo en mi alma, para sentirme liberado/a, con nuevas fuerzas y también perdonado/a.

 

Y suplico Adón que Tú también los perdones, ruego por ellos. Ahora perdono a todos ellos, los perdono voluntariamente y suelto todo rencor, odio, resentimiento, amargura y dolor de mi corazón y recibo la paz, el gozo y el consuelo de mi Adón Yahshua ha Mashíaj.

 

Recibo tu gozo y tu alegría, lo recibo todo ahora por fe. Sea sobre mí ahora un ruaj perdonador. Soy libre, puedo perdonar, porque todo lo puedo en Yahshua ha Mashiaj, que me fortalece.

 

Ahora, en el nombre de Yahshua Ha Mashiaj, desalojo de mi vida todo espíritu inmundo de envidia, rechazo, odio, rencor, amargura, dolor, todo ruaj de venganza, falta de perdón, sean expulsados de mi vida. Ahora se dispersan, en el nombre de Yahshua ha Mashiaj.

 

También te encomiendo Adón que yo mismo/a pueda perdonarme por todos los errores cometidos en el pasado. Ayúdame a olvidarlos. Adón, ayúdame a no condenarme, a no culparme y a entender que las cosas viejas ya pasaron. Libérame de todo sentimiento de auto-condenación, de culpa y de tormento, y que pueda yo enterrar mi pasado y seguir hacia adelante, hacia la meta que tú tienes para mí.

 

También suplico que si alguna persona tiene falta de perdón hacia mí, que ablandes su corazón y pueda perdonarme sinceramente. Muéstrame lo que hacer para resolver esta situación, y crea el momento adecuado para una reconciliación. Hoy, escojo caminar en la luz, como tú estás en la luz.

 

Escojo la vida y el perdón, desecho la amargura, la tristeza y la confusión. En el poderoso nombre de Yahshua ha Mashiaj. Gracias Padre porque me has liberado. Amén.

 

 

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