A menos de un mes que se suba por primera vez a la Quinta Vergara, Felipe Avello dio una extensa entrevista para hablar de cómo su carrera fue cambiando al punto de ahora estar entre el selecto grupo de los mejores comediantes de Chile en la actualidad. Claro que el camino no ha sido fácil y el periodista lo tiene claro.

Fue en conversación con la Revista Sábado de El Mercurio, que recordó el momento más difícil de su vida, la muerte de su hermano menor José, quien falleció en 2009 en un accidente automovilístico. A partir de ese episodio, todo cambió para él.

“Me acuerdo de todo, fue un sábado, yo estaba en Santiago y me llamó mi otro hermano, Reinaldo. Antes siempre decía: ‘Qué pasaría si alguien me avisara algo triste, y yo me tuviera que duchar, cómo sería esa ducha. Y pasó, me tuve que duchar e irme a Concepción. Heavy un accidente. De hecho, ha sido lo único trágico que me ha pasado en mi vida, trágico de verdad”, partió recordando el comediante.

Tras vivir este momento, Felipe reconoce que incluso pensó en dejar la televisión después de la pérdida de José: “Me alteró muchísimo (…) después de la muerte de mi hermano, me fui a vivir con mis papás a Concepción. Me iba los jueves y no volvía hasta el martes. Y ahí comencé a conectarme de nuevo con mi familia. Volví a la TV de otra manera, consciente de que no iba a hacer humor negro con la muerte de alguien si yo había vivido eso”.

Algo que para el ‘Pececillo’ fue realmente dramático fue haber acompañado a sus padres a un grupo de contención por hijos fallecidos. Ahí vio cómo todos portaban imágenes de quienes habían partido. Eso lo marcó y lo ayudó a madurar.

Avello recuerda que de ahí en adelante dejó de hablar de muertes y enfermedades en sus rutinas: “En los shows, por ejemplo, cambió mi forma, ya que al público no quiero agredirlo ni quiero incomodarlo, quiero sorprenderlo. Y para sorprenderlo, a veces hay que incomodarlo un poquitito, pero que lo pasen bien. Y cuando cambié eso, me sentí mucho mejor”, cerró.