Conservación de la tortuga golfina

8 de Noviembre de 2018

 

Centro de Conservación e Investigación de la Tortuga Golfina, en la comunidad de El Venado, Marcovia, Choluteca

 

Las tortugas marinas son reptiles de sangre fría y habitan en todos los océanos tropicales. Estos animales son exclusivamente marinos, pero salen a las playas para anidar. Cada año, al anidar, las tortugas remueven miles de toneladas de arena, lo que permite que la playa sea más saludable. En el mar, su variada alimentación contribuye al ciclo de carbono en los océanos, trasladando grandes cantidades de energía a zonas profundas, mediante el consumo de organismos abundantes en aguas superficiales y el depósito de sus heces como nutrientes que llegan al fondo del mar.

La súperfamilia de las tortugas marinas se conforma de 7 subespecies que son una parte importante del anillo que une al mar con la tierra:

-Tortuga baula

-Torguga caguama

-Tortuga carey

-Tortuga verde

-Tortuga lora

-Tortuga plana

-Tortuga golfina

Esta última, la tortuga golfina (Lepidochelys olivacea) puede medir entre 66 y 91 centímetros y pesar cerca de 100 lbs cuando alcanza la adultez. Su nombre lo recibe gracias a que todos los años, a partir de septiembre, sale del mar por las noches a desovar en las playas del Golfo de Fonseca. Cada tortuga deja entre 80 y 120 huevos que tardan 45 días en eclosionar.

No muchas de estas pequeñas tortugas llegan a la adultez, pues se ven amenazadas por la comercialización de los huevos como productos afrodisíacos y el consumo de su carne. También, las redes de pesca olvidadas, el transporte marino internacional y la contaminación llegan a afectar su ciclo de vida natural y salud.

Esto las cataloga como “vulnerables” en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN).}

 

La tortuga golfina en Honduras

En Honduras, el municipio de Marcovia, en Choluteca, tiene 5 campamentos, ubicados en la franja del Golfo de Fonseca, en los que la tortuga golfina llega a desovar y sus huevos quedan bajo vigilancia y protección de los tortugueros locales:

· Cedeño

· Boca del Río Viejo

· Carretales

· Punta Ratón

· Punta Condega, comunidad de El Venado

Punta Conandega, en el municipio de Marcovia, Choluteca

En la comunidad de El Venado, en Marcovia, Choluteca, los pobladores hacen un esfuerzo particular por la conservación de estas tortugas, pues los huevos dejados por las madres son llevados a viveros donde serán cuidados las 24 horas y posteriormente liberadas una vez que eclosionen.

Centro de Conservación e Investigación de la Tortuga Golfina en la comunidad de El Venado

Esta práctica comunitaria se remonta más de 20 años atrás. Las personas encargadas de vigilar los nidos se refugiaban en una choza hecha de algunos palos de madera y una lona. En al año 2008, con el apoyo delPrograma de Pequeñas Donaciones (PPD), impulsado por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), se construyó el Centro de Conservación e Investigación de la Tortuga Golfina en la comunidad de El Venado, un laboratorio para estudios científicos que presta las condiciones necesarias para investigar la tortuga golfina llevando el control de los datos recogidos. Posteriormente, pudieron construirse viveros que sirven como incubadoras artificiales para resguardar los huevos de tortuga hasta el día que estas rompan el cascarón.

Este año, 143 tortugas llegaron a desovar a Punta Conandega y dejaron 13,126 huevos, siendo en promedio de 91.79 huevos por tortuga. El 92.5% de los huevos tiene la probabilidad de sobrevivir antes de eclosionar, pero solo 1 de cada 1,000 tortuga llega a su etapa adulta, pues las crías son presa fácil para animales más grandes que ellas, entre otras amenazas a las que tienen que enfrentarse en su viaje por el océano.

La liberación de la tortuga golfina en la comunidad de El Venado se ha vuelto el mayor atractivo para los que visitan esta zona de Honduras. Por eso, los habitantes de esta comunidad han desarrollado un turismo sostenible, en el que una gran parte de la población de El Venado está involucrada. Tanto así, que, en la Semana Santa de este año, el 100% de la comunidad estuvo empleada.

 

“Cuando las comunidades disfrutan de ingresos y negocios, ahí, se construye la esperanza y nace una relación a largo plazo para la conservación de los recursos naturales”-Hugo Galeano, coordinador nacional del PPD

Se dice que el turismo es sostenible porque aprovecha responsablemente y conserva los recursos naturales. En el caso de esta comunidad sucede que los alimentos que consumen los visitantes son comprados a los pescadores locales por los restaurantes, las cabañas donde se hospedan los turistas o investigadores son atendidas por personas originarias de El Venado y las ganancias que estas generan son el sustento de mujeres y hombres trabajadores y lo que permite el mantenimiento del Centro de Conservación. Los recorridos en lancha por el bosque de mangle son una actividad recreativa frecuente, pero su importancia no es solo debido al entretenimiento de los visitantes.

Cabañas para hospedajes de visitante del Centro de Conservación e Investigación de la Tortuga Golfina

 

Más sobre el Programa de Pequeñas Donaciones (PPD):

El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) junto con Mi Ambiente y bajo financiamiento del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés), implementan el Programa de Pequeñas Donaciones (PPD) cuyo objetivo primordial es la conservación de la biodiversidad, acción contra el cambio climático, la degradación de la tierra, los contaminantes orgánicos persistentes y la protección de aguas internacionales. En 17 años, el PPD ha invertido L.268,000.00 (aprox. 6.8 millones de dólares) en 232 proyectos que han generado ingresos para las comunidades arriba de los L. 100 millones.

Los resultados del PPD se ven reflejados en el desarrollo de capacidades en las comunidades que formulan sus proyectos y se hacen responsables de su ejecución.