Agencias
VERACRUZ.- El Veracruz perdió mucho tiempo y la consecuencia fue una dolorosa derrota ante el Morelia.

Jugaban los dos equipos inmiscuidos en la lucha por no descender. Los Tiburones apenas estaban por encima del Morelia en la tabla del cociente, y, por ello, los purépechas salieron más iluminados.

Apenas a los 25 segundos del partido, un cabezazo de Raúl Ruidíaz dejaba atónitos a todos en el Pirata Fuente. El gol abría una herida en el Veracruz, que incomprensiblemente caminaba en el campo.

Por eso, otra vez el delantero peruano, en éxtasis, se encontró con otra oportunidad. No necesita de mucho Ruidíaz para sellar con su firma en la portería enemiga y lo hizo de nuevo ante Gallese.

Hasta el segundo tiempo el Veracruz reaccionó cuando el partido se había vuelto un torbellino de llegadas morelianas, que fueron desaprovechadas, por lo que Enrique Meza, enfurecido, reprendía a sus delanteros.

Julio Furch puso las pulsaciones a tope con un tanto que revivió la esperanza, pero fue demasiado el tiempo perdido por los jarochos.

No hubo remedio. El gol final de Juan Pablo Rodríguez casi sentencia el proyecto de Pablo Marini.

(Con información de Excélsior)