‘Enemigo de todos’: Venganza contra el sistema

En una de las escenas de Enemigo de todos (Hell or High Water, 2016), un viejo tejano se burla de la situación central del filme –una serie de robos a bancos–, diciendo que el modo de actuar de los criminales en cuestión es anticuado. De alguna forma la trama principal pertenece a un mito del Viejo Oeste americano (recuerden El gran robo del tren, de Edwin S. Porter), con un par de forajidos haciendo fechorías en diferentes poblados del oeste de Texas –y por ende generando ruido entre la población–, mientras el ranger local trata de unir las pistas con la ayuda de su colega. En algún punto incluso los civiles que pagan impuestos harán uso de sus armas buscando algo de justicia ante los criminales, como si en efecto el escenario fuese el siempre salvaje Viejo Oeste. Obviamente la diferencia es que el filme se sitúa en el presente.

La realidad indica que la América profunda sigue siendo mayoritariamente blanca y está plagada de armas que se pueden usar sin quebrantar la ley, además de que los prejuicios sociales no son cosa del pasado… porque, ¿en dónde sí lo son? Si bien el policía que está cerca del retiro (interpretado magistralmente por el veterano Jeff Bridges) muestra el lado ligero de la división de razas, los constantes chistes que le hace a su compañero sobre su origen indio y mexicano sirven para recordarnos al oeste de antaño, que en ocasiones simplificaba la lucha entre cowboys y nativos americanos. Los criminales protagonistas (un par de hermanos), por su parte, enfrentan un problema moderno; los brutales “villanos” ya no son los comanches, sino algo tan normalizado en nuestra sociedad como los bancos, los cuales no discriminan a la hora de victimizar.

Como lo dice el personaje de Chris Pine (quien por fin brilla sin tener que ponerse el traje del Capitán Kirk), su familia ha estado sumergida en la pobreza por generaciones. Junto a su hermano mayor (Ben Foster, sensacional) buscará revertir la situación y dejarle a sus hijos un mejor futuro, sin preocupaciones económicas; para llegar a esto, en su mente no hay otra manera más que saldar una hipoteca con dinero robado de los propios bancos. El título original hace referencia a una frase usada para expresar que harás algo sí o sí, sin importar lo que pase. La muerte de su madre da pie a que los hermanos entiendan que es ahora o nunca si quieren cambiar la historia familiar.

La camaradería y el amor fraternal, nunca puesto en duda, van de la mano con la redención que ambos buscan: Toby (Pine) ha sido un padre ausente debido a su divorcio; mientras que Tanner (Foster), asesinó a su propio padre y estuvo en prisión. A pesar de esto, por momentos estamos de su lado mientras ejecutan el plan y se topan con las inevitables complicaciones. Enemigo de todos es siempre tensa como esa heist movie en la que todo puede salir mal, en especial cuando los asaltantes siguen sus instintos: Toby tiene nula experiencia criminal y Tanner es básicamente un psicópata.

La contraparte está en Marcus (Bridges) y su compañero Alberto (Gil Birmingham), aunque en esencia mantienen una relación igualmente llena de camaradería y –aunque no lo demuestren a simple vista– respeto mutuo. La cacería que involucra a ambas parejas va creciendo en intensidad, porque los criminales comienzan como muchos, pensando que concretarán cada instancia de su estrategia sin dañar al hombre común; incluso en uno de los primeros atracos, Toby decide no quitarle su pistola a una de las víctimas, poniendo en riesgo su vida y la de Tanner, porque él va por el dinero del banco, no por las pertenencias del americano honrado.

David Mackenzie filma algunas escenas de violencia de una manera propia del cine de género. Hay persecuciones e incluso un momento de locura digno de Caracortada (Scarface, 1983); pero también la retrata de forma cruda y nos deja fríos una vez que los hermanos se topan con la realidad y se manchan las manos de sangre. En el mundo real la noción de efectuar un ambicioso plan criminal de manera heroica no existe, ni tampoco la de derrotar completamente al sistema.

Por Eric Ortiz (@ElMachoBionico)

    Related Posts

    Días de cine y maple: diarios del TIFF
    ‘Mujer Maravilla’: Más convencional que maravillosa
    ‘Star Trek: Sin límites’: La unión hace la fuerza
    Tiempo de amazonas: tráiler de ‘Mujer Maravilla’
    MUBI Presenta: ‘Al final de los sentidos’ de David Mackenzie
    Explosivo nuevo tráiler de ‘Star Trek Beyond’