Atentados del 17-A | El CNI espió los teléfonos de los autores días antes de la masacre
REDCOM
El CNI se ha dedicado a escuchar y transcribir todas las conversaciones entre los jóvenes terroristas musulmanes. Han seguido paso a paso y dato a dato, minuciosamente, todas las actividades de los terroristas, ejecutando así el más exhaustivo control de inteligencia posible a sólo cinco días de que cometieran los sangrientos atentados de Barcelona y Cambrils.
El medio digital español Público, en un segundo informe, ha revelado ayer que los servicios secretos españoles escuchaban, transcribían y controlaban todas las conversaciones entre los terroristas antes de que cometiera los atentados en Barcelona y Cambrils.
A más de 24 horas que Público destapara los vínculos del CNI con el cerebro de los atentados del 17-A en Barcelona y Cambrils, Abdelbaki se Satty, así como las escuchas telefónicas de las conversaciones de los autores materiales de la matanza, en Madrid se impone un absoluto y estremecedor silencio. Ninguna autoridad del Estado ha salido al paso de estas gravísimas acusaciones.
En el informe exclusivo, Público denuncia que el CNI (Centro Nacional de Inteligencia) espió los teléfonos móviles de los autores de los atentados del 17-A cinco días de la masacre. Las revelaciones sobre que los servicios secretos españoles escuchaban las conversaciones de los jóvenes radicalizados por el imán de Ripoll, Abdelbaky se Satty, son concluyentes.
El espionaje español se ha dedicado a escuchar y transcribir todas las conversaciones entre los jóvenes que supuestamente no estaban relacionados con la yihad, hasta ese momento. Esta prueba de cargo se debe a "un desliz en la redacción -por parte de los servicios secretos"- que revela que en vísperas de la masacre de Las Ramblas "los espías españoles estaban escuchando y anotando todas las conversaciones que mantenían (a través de sus teléfonos) quienes después cometerían la matanza.
Ahora bien, lo más habitual en caso de intervención telefónica –siempre autorizada por un juez, aunque en el caso del CNI recibe carta blanca para ello por parte del magistrado del Supremo asignado para atender las demandas del servicio secreto– es que esa vigilancia de las comunicaciones se limite a la geolocalización de los aparatos involucrados, el registro de su tráfico de llamadas y la identificación de los accesos a Internet desde esos terminales; controles conocidos en la jerga de inteligencia como “tarificaciones telefónicas”. Y el exhaustivo informe del CNI, hasta cierto punto, parecía ceñirse a ese escenario, aunque no deja de ser notable que la Inteligencia de España estuviera siguiendo al dedillo cada movimiento de unos veinteañeros sin antecedente policial ninguno.
Pero, el espionaje español no se ha limitado a hacer “tarificaciones telefónicas”, sino que se estaba dedicando a escuchar y transcribir todas las conversaciones entre los terroristas supuestamente no relacionados aún con la trama yihadista, ejecutando de esta forma el más exhaustivo control de inteligencia posible, para el que se requieren importantes recursos materiales y humanos.
Si bien el CNI seguía paso a paso y minuciosamente toda actividad de los terroristas, esto ha sido posible gracias a que "el servicio secreto contaba con se Satty -líder de la célula- como confidente". Este había ofrecido a su controlador los datos del resto de la célula, aunque "seguramente sin revelar sus verdaderos planes".
El Gobierno catalán exige responsabilidades a la Moncloa
Frente a estas aterradoras revelaciones, y con caracter de extrema urgencia, este mismo martes el Gobierno ha exigido "responsabilidades" en la Moncloa por el vínculo entre el imán de Ripoll y el CNI, ya que según las informaciones publicadas el primero ha ejercido como confidente del CNI hasta que se llevaran a cabo los atentados en Barcelona y Cambrils. Atentados de los que ha sido su cerebro y para los que agrupó a una serie de jóvenes de la capital del Ripollès.
ERC y JxCat han vuelto a pedir una comisión en el Congreso sobre el 17-A tras las nuevas y más que preocupantes revelaciones. Concretamente, reclaman las comparecencias de Pedro Sánchez, la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, y del ex director del CNI, Félix Sanz Roldán. Ambos grupos independentistas quieren que se aclaren y en profundidad, las informaciones por el medio digital.
El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha "exigido" la apertura de la comisión que los grupos mayoritarios y la comparecencia Sánchez, Robles y Sanz Roldán "para que den unas explicaciones que cualquier demócrata debe exigir y que en cualquier país civilizado y plenamente democrático deberían existir ".
La portavoz de JxCat el Congreso, Laura Borràs, ha recordado que en la comisión de investigación del Parlamento el ex secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, atribuyó a los Mossos la responsabilidad de no detectar la radicalización del imán de Ripoll y negó que tuviera conocimiento de esta relación.
El método: buzón muerto
Las revelaciones sobre Abdelbaky se Satty, imán de Ripoll, muestran el correo "adamperez27177@gmail.com", que sería el que utilizaran el imán y el CNI para comunicarse, a través de la técnica del "buzón muerto". Es decir, los correos no se envían, sino que se dejan como borrador. Para leerlos hay que entrar en el correo con las claves correspondientes. El hecho de no enviar nada hace que la comunicación no deje rastro.
La contraseña del correo, que se ha encontrado en un papel manuscrito entre los restos del chalet de Alcanar, era PEREJUAN18. Había dos mensajes en la carpeta de borradores y la última modificación de la configuración de la cuenta es de marzo de 2017. El primer mensaje es del 24 de mayo del 2017 y dice:
"Veo que has podido entrar, sólo tienes que dejar escrito un mensaje como éste como borrador y yo lo leeré. Ya puedes empezar a escribir cosas. Gracias amigo ".
Estan convencidos de que este mensaje es del agente del CNI que controla Se Satty y que la dirección de correo lo habría creado él para comunicarse con el imán de Ripoll. El segundo borrador en bandeja es del 19 de junio de 2017, unos días más tarde y dice literal:
"?No tienes nada para escribir o es que no puedes hacerlo?. Hoy es lunes 19 de junio".
Todo esto sucede mientras los miembros de la célula fabrican los explosivos en Alcanar, lo que confirma el testimonio del único superviviente de la deflagración.
Ripoll: Un imán confidente
En una exelente crónica publicada hace 8 meses en el medio alternativo VilaWeb, el colega Vicent Partal nos describe "Las cien horas de persecución a Younes", uno de los autores de los atentados de Barcelona y Cambrils que se convirtió en la mayor operación realizada nunca antes por la policía catalana, en respuesta a una situación crítica que debía dejar dolorosamente marcada y para siempre a la sociedad.
El 17 de agosto de 2017, los atentados en Barcelona y Cambrils sacudieron a la Nación catalana, poniendo a prueba como nunca la capacidad del gobierno, y especialmente, de su policía. La crónica bucea en la historia de cómo vivieron aquellos días el núcleo de agentes del cuerpo de Mossos d'Esquadra que hace años que trabajan siguiendo de cerca la amenaza yihadista.
Pero quiciéramos detenernos en un detalle sustancial que ha aportado Partal, y que hoy, tras lo revelado por Público, cobra un enorme sentido. Y tiene que ver con la localidad de Ripoll, y con el imán confidente del CNI, Abdelbaki se-Satty.
En principio, Ripoll no entraba en los planes de las pesquisas. Pero, tras haber sido identificados los coches de Alcanar y, aún más, tras el atentado de Cambrils, la relación de Ripoll con el grupo terrorista era evidente. Cuatro de los domicilios de los atacantes eran en Ripoll, lo que implicaba la existencia de un grupo consolidado en esta villa.
Los hilos de la investigacion contra reloj llevaron a los Mossos a entrevistarse con el presidente de la mezquita Annour. El relato de Ali Yassine los dejó helados: la policía española había visitado la mezquita en tres ocasiones, la última tan sólo un mes antes del 17A. Lo peor: la policía catalana no sabía nada.
En ese momento, nadie sabía aunque Abdelbaki se-Satty, el imán de Annour hasta hacía pocas semanas, era un confidente de la policía española y la cabeza del grupo que había preparado los atentados. Tampoco se sabía que había muerto en la explosión de Alcanar.
Ali Yassine explicó que, en abril de 2016, se habían presentado a la mezquita dos miembros de la policía española con base en Girona pidiendo por miembros de la junta de de la mezquita. Y dejaron un correo electrónico oficial al que les enviaron toda la documentación que pedían. Posteriormente, dos miembros de la policía española volvieron a Ripoll, pidiendo los estatutos de la junta y, específicamente por Abdelbaki se-Satty. En julio de 2017, funcionarios de la policía española hicieron una tercera visita y pidieron si había habido algún cambio en el organigrama del oratorio. Les respondieron que se-Satty había sido despedido y que se había marchado diciendo que se iba Marruecos.
Posteriormente a estos relatos, el gobierno español "reconoció que se-Satty era confidente de la policía española hacía años", por lo que aparecieron las preguntas tan incómodas como naturales: ¿qué razón tenía la policía española para ocultar a la policía catalana su presencia en Ripoll? Y ¿cómo es que no sabían que su confidente había huido ni se han preocuparon de saber dónde estaba? Un mes antes de los atentados sabían, por fuerza, que habían perdido la pista de un confidente, una persona con vínculos yihadistas demostrados, que había estado en la cárcel y que había sido identificado como colaborador en varias operaciones anteriores. En ese momento, aunque no estaba claro si algunos de los restos humanos que iban apareciendo en la casa de Alcanar pertenecían a se-Satty, pronto se supo que sí. Y entonces, las preguntas y los rumores sobre qué cosas sabía el gobierno español y cuáles no, fueron imparables. Sin embargo, no han dado nunca ninguna explicación concluyente.
Hoy, a dos años de los atentados, igual que ayer, desde Madrid se impone un silencio ensordecedor. Hace ya más de 24 horas que Público destapó los vínculos que -confirman acabadamente- atan al CNI con el cerebro de los atentados del 17-A en Barcelona y Cambrils, Abdelbaki se Satty , así como las escuchas telefónicas de las conversaciones de los autores materiales de la matanza . Pero por el momento, y desde 2017 incluso, ninguna autoridad del Estado ha salido al paso de estas graves acusaciones.
MEMORIA, VERDAD Y JUSTICIA!!!
Fuentes: Público/Naciò Digital/VillaWeb/El Nacional/