Ciudad de México, 5 de oct (sinembargo.mx) – Juan José Sabines Guerrero, priista de origen, ganó la gubernatura de Chiapas de la mano de la izquierda hace seis años y ahora lega el poder de nuevo al tricolor, en una transición cuestionada por su claro apoyo al candidato Manuel Velasco Coello y la indiferencia mostrada a la abanderada de las izquierdas, María Elena Orantes.

Hijo del ex gobernador chiapaneco Juan Sabines Gutiérrez, y sobrino del poeta Jaime Sabines, el actual mandatario culminará su gestión el próximo 8 de diciembre entre reclamos por el severo endeudamiento con que deja al estado –más de 40 mil millones de pesos, que superan al famoso “Moreirazo” en Coahuila– y la situación de pobreza y marginación que enfrentan miles de chiapanecos, la mayoría indígenas.

De amigos poderosos, deslindado del PRD –partido que luego del 1 de julio pasado quedó fracturado en Chiapas– y con la satisfacción de que la nueva administración le garantiza la tranquilidad por los próximos seis años, Sabines Guerrero parece no inmutarse por los problemas que heredará.

Y es que además, sus ex colaboradores han salido beneficiados políticamente en los últimos meses.

Yassir Vázquez Hernández, ex alcalde de Tuxtla Gutiérrez, fue nombrado a mediados de abril como delegado nacional del Partido Verde Ecologista en el estado; y Raciel López Salazar, ex procurador de Justicia de la entidad y hombre responsable del encarcelamiento del también ex gobernador chiapaneco, Pablo Salazar Mendiguchía, fue registrado por el PVEM como diputado plurinominal.

De acuerdo con diversas investigaciones, el gobernador cuenta con el respaldo de poderosos empresarios a quienes ha beneficiado desde su puesto, entre ellos Ricardo Salinas Pliego.

El último “regalito” de Sabines para Salinas Pliego tiene que ver con una concesión minera en el municipio de Acacoyagua, en donde el gobernador habría autorizado, a pesar de varias denuncias por daño ambiental, la extracción durante los próximos 20 años de titanio, hierro y magnetita de la mina “Titán”, la cual, según fuentes extraoficiales, pertenece al Grupo Salinas-Pliego.

Licenciado en Ciencias Políticas y Administración Pública egresado de la Universidad Iberoamericana. Tiene estudios en Relaciones Internacionales en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); Finanzas Públicas en la Universidad de Berkeley, California; Administración Pública Municipal en la Universidad Iberoamericana y Doctrina Social de la Iglesia en el IMDOSOC, entre otros.

Información de su sitio web plantea que en 1994 inició su trayectoria política como asesor en Representación del Gobierno del Estado de Chiapas en el Distrito Federal. Para 1995 ocupó la Dirección de Servicios Médicos, Desarrollo Social y Asistencial en la Delegación Cuauhtémoc del Distrito Federal.

En 1998 fue Secretario General Adjunto del Comité Directivo Estatal del PRI en Chiapas. En Tuxtla Gutiérrez se desempeñó como Secretario General Municipal y, posteriormente, fue Presidente del Comité Directivo Municipal de la misma localidad.

En 2001 fue electo como Diputado Local de la Zona Oriente de Chiapas. En 2004 se convirtió en Presidente Municipal de Tuxtla Gutiérrez.

Dos años más tarde, ya buscaba ser el candidato de su partido al gobierno de Chiapas. Sin embargo, al no ser elegido, renunció al tricolor y contendió por el PRD-PT-Convergencia -Coalición por el Bien de Todos-, ganando la gubernatura del estado.

Pese a conseguir el triunfo con la izquierda, algunos afirman que jamás dejó de ser priista.

DEUDA DEL ESTADO

De acuerdo con Paseo Virreyes del 19 de agosto, publicado en SinEmbargo.mx, Sabines dejará al estado sumido en una deuda que, según datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, alcanza los 16 mil 513.1 millones de pesos –cifra que coloca a Chiapas entre los cinco estados de la República más endeudados–, aunque según la columna Templo Mayor del diario Reforma, publicada el 14 de agosto, la deuda ya rebasa los 40 mil millones de pesos si se suma la deuda registrada, no registrada y a proveedores.

Apenas el pasado 12 septiembre, el gobernador solicitó al Congreso del Estado autorización para contratar un crédito de 5 mil millones de pesos para la transición del próximo gobierno, de acuerdo con Reforma y Proceso.

La “Iniciativa de decreto por el que se constituye el Fideicomiso para el cierre inicio de la administración pública estatal” presentada por Sabines a tres meses de dejar el cargo establece la adquisición de ese financiamiento más intereses, reservas, comisiones, accesorios y gastos financieros.

El gobernador actual envió la iniciativa el pasado miércoles 5 de septiembre, así como un paquete de 23 iniciativas de reformas a la Constitución, a leyes secundarias y diversos decretos para garantizar el cierre de su administración y el arranque de Velasco Coello.

Pero esta millonaria solicitud no fue bien vista por los ciudadanos, quienes expresaron su repudio al gobernante y el 14 de septiembre, “en el Congreso del estado apareció misteriosamente una iniciativa con una cantidad sumamente inferior: 3.5 millones de pesos”, dio a conocer Proceso.

De acuerdo con su corresponsal en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, a diferencia del documento original que demandaba hasta 5 mil millones de pesos que serían pedidos a la banca público, este documento señala que los 3.5 millones se dispondrán del erario estatal.

“Qué va de 5 mil millones a 3.5 millones, hay una abismal diferencia”, dijo el diputado del PT, Carlos Mario Estrada, cita Proceso.

Pese a la controversia, el mandatario se salió con la suya. El 3 de octubre, en la primera sesión ordinaria de la LXV legislatura del Congreso del Estado, el órgano legislativo autorizó al gobernador Juan José Sabines Guerrero un financiamiento de 3 mil 870 millones de pesos para inversiones públicas productivas en el estado, más gastos de instrumentación.

La sesión concluyó con una votación de 33 votos a favor de la iniciativa, siete votos en contra y una abstención, de un total de 41 diputados.

El dictamen sometido al pleno fue leído ayer por el diputado secretario de la mesa directiva, Saín Cruz Trinidad.

En él se establece que la mitad del monto autorizado podrá disponerse inmediatamente, en tanto que el resto estará disponible a partir del ocho de diciembre del año en curso, para la administración del ahora gobernador electo, Manuel Velasco Coello, quien debutará su administración con un adeudo público de 20 mil millones de pesos.

Asimismo, la SHCP del estado negociará y determinará los términos y condiciones de los contratos, convenios, títulos de crédito y demás documentos mediante los cuales se instrumenten las operaciones

Además, informaron que la Secretaría de Hacienda deberá presupuestar anualmente las partidas que resulten necesarias para cumplir con sus obligaciones de pago.

Dicha aprobación dejará a la próxima administración una deuda de 40 mil millones de pesos, más de la que dejó Humberto Moreira en su gestión (36 mil millones de pesos), según informó el diario Reforma el 4 de octubre.

La deuda de Chiapas hasta el cierre del 2011 era de 26 mil 972 millones de pesos a la que se le sumarán los 3 mil 870, por lo que Manuel Velasco comenzará su mandato con más de 40 millones de pesos.

Las criticas no se hicieron esperar, sobre todo del partido que lo postuló como gobernador: el PRD. “La legislatura dura tres años y la vergüenza toda la vida, no podemos dejar de pronunciarnos en contra de un aumento de la deuda”, expresó la diputada perredista Alejandra Soriana Ruiz.

POBREZA Y MARGINACIÓN

Pero mientras la deuda aumenta, los pobres e indígenas en el estado continúan viviendo bajo pésimas condiciones.

De acuerdo con el analista político Gaspar Morquecho Escamilla, en entrevista para El Universal publicada el 27 de abril de 2012, los desafíos históricos de la pobreza y la marginación de los pueblos indígenas, así como la crisis del campo, la migración rural y urbana por la falta de empleos y reactivación económica, son los grandes retos que enfrentará el siguiente gobierno de Chiapas.

No se trata de un tema nuevo, sino de uno que lleva años sin solución.

El 22 de diciembre de 2009, diversos medios publicaron las declaraciones del entonces diputado priista, Javier Martínez Vargas quien aseguró que las condiciones de los pueblos y comunidades indígenas en Chiapas son aún preocupantes.

Martínez Vargas señaló que lamentablemente el número de habitantes en la entidad sin acceso a servicios de agua potable son 1.1 millones de habitantes y 891 mil a saneamiento.

Comentó que el número de habitantes en condición de pobreza alimentaria asciende a dos millones 17 mil 517, y tres millones 248 mil 450 en pobreza de patrimonio.

Sin embargo, la situación no mejoró y para 2010, el estado mantenía el primer lugar de pobreza en el país. A tres años de que el perredista Juan Sabines llegara a la gubernatura, persistía el rezago social que ha marcado al estado durante décadas.

De acuerdo con funcionarios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el estado presentaba el más bajo índice de desarrollo humano, con una población total de cuatro millones 293 mil 459 personas.

A su vez, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) identificó a 28 municipios de la entidad con el menor índice de desarrollo humano.

También se reveló que los municipios más pobres de la entidad son Sitalá, Santiago El Pinar, Aldama, Chalchihuitán, Mitontic, San Juan Chamula, San Juan Cancuc, Chenalhó, Chanal, Zinacantán, Chilón, San Andrés Duraznal, Pantelhó, Ocotepec, Francisco León, Pantepec, Tumbalá y Amatenango del Valle.

Asimismo, Larráinzar, Huitiupán, Maravilla Tenejapa, Huixtán, Marqués de Comillas, Salto de Agua, Amatán, Sabanilla, Oxhuc y Tenejapa, donde se concentran una población de 638 mil 662 personas, 98 por ciento de los cuales son indígenas.

Dos años más tarde, en 2012, el último del gobierno de Sabines, CNN informó que “Chiapas tiene un rezago social, cultural y económico de por lo menos 50 años, y pareciera que prácticamente ha sido olvidada por el Gobierno federal y estatal”.

“Con casi 4.8 millones de habitantes, Chiapas tiene el mayor porcentaje de población que habla exclusivamente alguna lengua indígena: 36 de cada 100 pobladores”, indicó CNN.

A pesar de esta situación, el 3 de septiembre, el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso local, Javín Guzmán Vilchis, aseveró que al estado “le fue muy bien durante el sexenio de (Felipe) Calderón Hinojosa, pues ha dejado de ser primer lugar en pobreza y pasó al tercero”.

EL PLEITO CON SALAZAR MENDIGUCHÍA

El ex gobernador de Chiapas, Pablo Salazar Mendiguchía, fue detenido el 7 de junio del 2011 en el aeropuerto de Cancún, Quintana Roo.

Está recluido en el Penal de El Amate. Durante los casi 15 meses que lleva preso, el ex funcionario local ha logrado interponer y ganar varios amparos.

El ex mandatario local enfrenta una decena de procesos penales por delitos que van desde homicidio doloso hasta defraudación y operaciones con recursos de procedencia ilícita.

En dos de estos casos, el juez no encontró elementos suficientes para enjuiciarlo, por lo que dictaminó su revisión.

El primer proceso penal por el cual fue capturado tuvo que ver por un supuesto bono de 104 millones de pesos que se repartieron Salazar y más de 50 de sus colaboradores, de los cuales solo siete han sido detenidos.

Desde la prisión, ha alzado la voz en contra del actual gobernador, a quien ha acusado de desvío de recursos y espionaje.

A finales de enero, pidió a la Procuraduría General de la República (PGR) y al Congreso de la Unión investigar el presunto desvío de recursos que Sabines Guerrero ha realizado durante su administración: “No pueden, señores legisladores, permitir que el dinero destinado para los gobernados termine en las bolsas de una pandilla de ladrones que gobierna”.

Meses más tarde, en mayo, denunció ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ser objeto de espionaje por parte del gobierno de Juan Sabines al encontrar varios micrófonos ocultos en su celda.

Mediante una carta, el exmandatario recordó que “gracias a la oportuna e insistente intervención de la CNDH”, logró que se retiraran de su celda las cámaras de videograbación que –agregó– “constituían una grave violación a mis derechos humanos”.

No obstante, dijo que “en una clara burla de los órganos represores de Sabines a la autoridad de ese organismo defensor, la Procuraduría General de Justicia del estado (PGJE) de Chiapas sembró en diversos sitios de mi celda micrófonos, inclusive en el baño, para espiarme de manera ilegal, con lo que confirman el trato de preso político que siempre me han dado y el cual se han empeñado en negar”.

Explicó que tan pronto como supo de estos micrófonos ocultos, pidió la inmediata intervención de la CNDH, que envió a dos de sus visitadores adjuntos, “quienes, en uso de sus facultades, recibieron la nueva queja y dieron fe pública de la evidencia que les fue puesta a disposición”.

Salazar Mendiguchía mencionó que ya antes había denunciado “esta red de espionaje por demás ilegal, que tiene enclaves de monitoreo en la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, PGJE, Palacio de Gobierno, Casa de Gobierno y el propio Amate”.

Según el ex mandatario, ha sido obligado a recibir visitas bajo un fuerte dispositivo de elementos policiacos que vigilan todos sus movimientos y diálogos, además de las cámaras de videograbación que lo siguen a cada momento.

El ex gobernador chiapaneco se quejó también de que es sometido a un exhaustivo registro de todo lo que lee y escribe, y que sólo le permiten hablar por teléfono durante 15 minutos, rodeado de elementos de seguridad.

“Sólo me resta preguntar una vez más: ¿A qué le teme Sabines?”, cuestionó Salazar Mendiguchía.

 Apenas el pasado 28 de septiembre, se dio a conocer que el exgobernador terminará de cumplir su condena en arraigo domiciliario por motivos de salud.

A menos de tres meses de que finalice la administración de Juan Sabines como gobernador estatal, confirmaron fuentes del Gobierno del Estado que abandonará el penal de El Amate, ubicado en el municipio de Cintalapa, para ser trasladado a su casa.

Quienes apoyan a Salazar Mendiguchía, han considerado su detención como una venganza politica por el manejo de los 11 mil millones de pesos que se utilizaron para reconstruir el estado después de la devastación que provocó el huracán “Stan”, en 2005.

La historia de este conflicto se remonta a 2009, cuando la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) ingresó al penal El Amate al ex fiscal general de Justicia del estado y ex secretario estatal de Economía, Mariano Herrán Salvatti, acusado de asociación delictuosa, peculado, ejercicio ilegal del servicio público y abuso de confianza en agravio del patrimonio del Estado y de la sociedad.

El ahora ex procurador general de justicia del estado Raciel López Salazar informó entonces que el ex funcionario estatal incurrió en conductas ilícitas durante su desempeño como secretario de Economía durante la administración actual del gobernador.

Sin embargo, el 13 de septiembre pasado, Herrán Salvatti fue exonerado tras más de tres años en prisión, de los cargos que se le imputaban.

En el último año, el inculpado salió de prisión para ser internado primero en un hospital, y luego trasladado a su domicilio, argumentando problemas de salud; ahí permaneció los últimos meses en prisión domiciliaria.

En este mismo periodo el exprocurador fungió como testigo de cargo en varios de los procesos penales que se le siguen a Pablo Salazar Mendiguchía, por lo que éste lo acusó de confabularse con la actual administración, para acusarlo y hundirlo.

Pero el caso de Mariano Herrán Salvatti no ha sido el único relacionado con el peculado.

El 26 de noviembre de 2008, el Ministerio de Justicia del Estado (MJE) detuvo al exdirector general de la desaparecida Comisión Estatal de Agua y Saneamiento ( CEAS), Mario Bustamante Grajales, por presunto peculado de más de 90 millones de pesos, ejercidos durante los trabajos de reconstrucción en los municipios afectados por el huracán “Stan” en 2005.

El ex colaborador del Pablo Salazar Mendiguchía enfrenta también cargos de asociación delictuosa y ejercicio indebido de funciones.

Alfredo Palacios Espinosa, Socorro Domínguez Aguilar y William Alfonso Maldonado Mauregui, entre muchos otros ex colaboradores de Salazar, también han sido acusados por la administración actual de peculado, ejercicio indebido del servicio público, abuso de funciones públicas, abuso de autoridad y asociación delictuosa.

OBRAS SIN ENTREGAR

De acuerdo con un reportaje de Isaín Mandujano, publicado por Proceso, a pesar del endeudamiento, los conflictos por falta de dinero han ido proliferando en Chiapas durante lo que va del segundo semestre del año.

Durante este periodo, han ido en aumento las marchas y bloqueos de chiapanecos inconformes que exigen la conclusión de obras y proyectos.

Según Paseo Virreyes del 19 de agosto, las obras de remodelación del centro de Tuxtla Gutiérrez deberían de haber concluido en diciembre del año pasado, pero hasta la fecha siguen los trabajos. El gobernador se ha comprometido en varias ocasiones a dejar los trabajos finalizados antes de que termine su administración, el 8 de diciembre de este año: “Vamos a acabar esas obras antes, las obras del centro de la ciudad tuvo una alta inversión y fue muy afortunada la obra”.

Pero mientras las criticas continúan y su gestión culmina, Sabines defiende su trabajo y la deuda afirmando que de no haber contratado los créditos con la banca del gobierno mexicano, difícilmente se hubiera podido sacar a Chiapas de los primeros lugares de marginación.

“En un Chiapas mejor, donde la gente, las familias a pesar de la crisis que vivió México, a pesar de las pandemias que vivió México a pesar de la violencia que se vive en algunas partes de México, a pesar de todo ello estamos entregando un mejor Chiapas. ¿Qué importa esta deuda? Por supuesto que importa y hay que pagarla y la estamos haciendo de manera responsable”, expresó el mandatario.

EN PRO DE LOS MIGRANTES

El presidente de Guatemala, Álvaro Colom, condecoró el 2 de junio de 2011 al gobernador de Chiapas, Juan Sabines Guerrero, con la Orden del Quetzal, en grado de Gran Cruz, por las acciones que el mandatario estatal mexicano ha realizado en pro de los migrantes.

Colom dijo que la condecoración se le otorgaba por “su solidaridad natural, porque no pedimos sino que fue a manera de esa actitud hacia estos héroes que van en busca de una mejor vida”. Y le reconoció: “Gracias por ser la persona que eres (gobernador Juan Sabines Guerrero)”.

El 29 de julio de 2012, el gobernador, acompañado por Thomas Weiss, jefe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en México,  anunció en Tuxtla Gutiérrez el inicio de la Campaña para la Prevención de Delitos Cometidos contra Migrantes.

Sin embargo, algunas organizaciones y diversos medios indican que hay pocos avances en esta materia en el estado, donde los indocumentados llegan por cientos con la idea de que el gobernador los protegerá y en vez de ello, se enfrentan a un “verdadero infierno”, pues aseguran que no hay autoridades que vigilen el paso de los migrantes y que impidan que grupos criminales los despojen de sus pertenencias.

UN PRD FRACTURADO

Luego de un intento fallido de la izquierda por elegir a su candidato rumbo a los comicios del 1 de julio, por “default”, la ex priísta María Elena Orantes López fue electa representante del Diálogo para la Reconstrucción de México a la gubernatura del estado.

A mediados de enero, Orantes renunció al PRI y acusó a Enrique Peña Nieto de misógino. Según Orantes, las palabras del el ex gobernador del Estado de México fueron las siguientes: “Hay un compromiso con el Partido Verde, María Elena. Será Manuel Velasco el candidato. Tú no puedes ser la candidata a gobernadora porque eres mujer. Eso te vuelve vulnerable”. De acuerdo con el diario Impacto, el encargado de negociar el apoyo de otro partido para las aspiraciones de la política fue el gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero. 

El 8 de febrero, la senadora Orantes fue presentada por Manuel Camacho Solís como la candidata de la izquierda a la gubernatura de Chiapas. Estuvieron presentes Dolores Padierna y Jesús Zambrano.

Su designación provocó una desbandada perredista en Chiapas, una de las razones fue que la acusaron de ser uno de los personajes que impulsó el desafuero de Andrés Manuel López Obrador en 2005.

Debido a la debilidad del partido y los muchos errores durante la gestión de Sabines, los detractores hablaban de un fracaso anunciado en la campaña de Orantes, quien no consiguió un tercer mandato en Chiapas para la izquierda.

Por si esto fuera poco, se dice que Sabines jamás la consideró su candidata, pues siempre apoyó al priista Manuel Velasco, quien obtuvo el triunfo estatal. 

El 5 de agosto, casi un mes después de los comicios, miembros del PRD que apoyaron la candidatura de Orantes López pidieron a la dirigencia nacional de su partido deslindarse del gobernador chiapaneco ya que “se desempeñó como coordinador general de campaña de Enrique Peña Nieto y Manuel Velasco Coello, con el fin de que la militancia y la ciudadanía tengan claro que nada en común tenemos con él y su gobierno”. Además, anunciaron que buscarán que se audite a la administración actual y que en caso de encontrarse irregularidades impulsarán los castigos correspondientes.

Líderes de todas las corrientes internas del PRD se unieron para desconocer a la dirigencia estatal de su partido así como para anunciar el proceso de expulsión de 52 militantes, entre los que destacan el líder estatal Luis Raquel Cal y Mayor Franco, el ex senador Rutilio Escandón Cadenas y Alejandro Gamboa López.

Por su parte, el líder nacional del PRD, Jesús Zambrano Grijalva, no se quedó con las manos cruzadas y acusó al gobernador chiapaneco de faltar a su palabra e intervenir en el proceso electoral. “El PRD fue traicionado por el gobernador. Estamos en la obligación de hacer una recomposición del partido en el estado, y expulsar a quienes se fueron del otro lado”, dijo el líder izquierdista y agregó que Sabines y un grupo de empleados “leales” a él trabajaron para quitarle votos a la izquierda y dar la victoria a Velasco Coello.

HEREDA GOBIERNO AL PRI

Luego de que los gobiernos de Salazar y Sabines han dejado un mal sabor de boca a los chiapanecos, las encuestas siempre dieron ventaja a la alianza compuesta por PRI, PVEM y PANAL, cuyo abanderado fue Manuel Velasco Coello.

Desde 2010, algunos medios aseguraron que Velasco Coello sería el “delfín” de Sabines. Varias veces se les ha visto juntos y el joven se desvive en halagos y reconocimientos al actual gobernador.

El 24 de mayo pasado, el senador perredista Carlos Sotelo García acusó al gobernador  de haber convertido el palacio de gobierno en la oficina de campaña del PRI y del PVEM, porque tenía acuerdos políticos con Enrique Peña Nieto y con el candidato a la gubernatura.

Sabines aseguró en conferencia de prensa que Sotelo García, “intenta anular la voluntad soberana del pueblo de Chiapas para que decida por quién votar, queriendo perjudicar la campaña de Andrés Manuel López Obrador, y atajar el crecimiento que tiene  la candidata María Elena Orantes”.

Pese a las acusaciones, el 1 de julio pasado, tras 12 años al frente del gobierno de Chiapas, el Partido de la Revolución Democrática perdió en las urnas frente al “Güero” Velasco, quien con sus 32 años se convertirá en el gobernador más joven del país. 

Este triunfo ha sido calificado por algunos como un motivo de felicidad para Sabines, pues su verdadero “gallo” triunfó en las elecciones y con ello podrá estar tranquilo los próximos seis años.

Velasco Coello ganó la contienda electoral por un total de un millón 343 mil 980 votos, es decir, el 70.57% de la votación emitida.

Cuando le fue entregada su constancia de mayoría, en julio, no perdió en tiempo para elogiar al actual mandatario a quien consideró un “demócrata” y explicó que el suyo será un gobierno de “continuidad”, pues procurará fortalecer los programas que inició la actual administración desde el 2006, pues “estos programas no son ocurrencias sexenales”.