El Ayuntamiento inicia los trámites para que Zaragoza sea una "ciudad refugio"

El Consistorio zaragozano trabaja para que la capital aragonesa se sume a la red de "ciudades refugio". Así lo ha anunciado este jueves la vicealcaldesa y consejera municipal de Derechos Sociales, Luisa Broto, quien ha concretado que estudian cómo albergar a los refugiados garantizándoles unas coberturas de necesidades básicas.

Zaragoza.- El Ayuntamiento de la capital aragonesa ya ha iniciado las conversaciones para que Zaragoza sea “una ciudad refugio”. En este sentido, la vicealcaldesa, Luisa Broto, ha explicado que se está planteando el objetivo de esta situación, “si sólo es algo a nivel nominativo o realmente hay un trabajo más serio de cómo atender a estas personas porque habría que garantizar su suficiencia, un recorrido, atención socio sanitaria”.

Por ello, “estamos pendientes de cómo se configura esta respuesta a nivel institucional nacional”, ya que el cupo de refugiados, asilados y apátridas es a nivel de la Administración central. Si se hace una valoración positiva, ha afirmado Broto, “estaremos dispuestos a ser otra de las ciudades que acoja”. Eso sí, ha puntualizado la vicealcaldesa, “con unos recorridos e itinerarios”. Conceptos que hacen referencia a que la familia acogida “tiene que tener una red de protección”.

De esta forma, el Ayuntamiento de Zaragoza ya ha iniciado los contactos con entidades como la Federación Aragonesa de Solidaridad, que tienen experiencia en la atención de personas refugiadas y asiladas, pero ahora “necesitamos cautela y esperar a la respuesta de las administraciones”.

Las entidades con más experiencia tienen este concepto “muy trabajado”, por lo que antes de lanzar una red de protección que pudiera garantizar que estas personas estuvieran aquí con las mejores condiciones”. Se refería así Broto a coberturas de necesidades básicas como en el ámbito sanitario o educativo. Es decir, “articularlo de una manera que no sea sólo un lanzamiento, sino que tenga una consistencia”.

También habría que estudiar qué capacidad tiene Zaragoza para acoger a familias. Al respecto, Broto ha explicado que habría que ver si sería “a través de iniciativa privada, familias como las que acogen a niños saharauis en verano…”. “Yo he oído y leído grandes expresiones de solidaridad de personas, pero efectivamente tienen que saber qué implica y de qué manera”, ha agregado Broto.

La posibilidad de acceder a un cupo de refugiados está limitada por el Gobierno central. Si el Estado habilita una serie de cupos que se amplíen por zonas, comunidades autónomas o incluso por capitales de provincia “nosotros admitiremos todo lo que se nos plantee”, ha reconocido Broto.

Es decir, que el Ayuntamiento trabaja por un lado para saber cuál sería la forma de atender a estas personas y, por otro, que el proceso requiere de unos requisitos y está a la espera de que se articulen. 


Editorial: Zaragoza, ciudad refugio