Renovarse o prorrogarse. Esa es la cuestión para el sector de la cogeneración en España. En los próximos dos años, 50 plantas de cogeneración (que suman una potencia instalada de 500 MW) habrán llegado al final de su vida útil y casi un centenar de industrias tendrán que tomar decisiones de inversión. Por eso piden un Plan Renove, al que se le espera desde que en 2013 la Ley del Sector Eléctrico quedara recogido en esa normativa.
Sin embargo, según ha podido saber El Periódico de la Energía de fuentes cercanas al gobierno, “no hay una intención clara de sacar adelante un Plan Renove, y si se hace, será suave, porque el objetivo es ir reduciendo esta tecnología en el mix del futuro”.
Las mismas fuentes señalan a este diario que “lo que sí se aprobará es un periodo transitorio para prorrogar la actual retribución regulada de estas instalaciones”. Y no solo porque “no se termine de ver la cogeneración que usa gas a medio plazo” sino porque “se sabe que algunas de estas industrias funcionan solo con el objetivo de cobrar esa retribución y eso no puede ser“.
“Eso sería una ilegalidad”, explica Javier Rodríguez, director general de Acogen, “tenemos un marco legal y las empresas tienen que entregar un informe en el que se incluye cuál es el uso del gas, verificado y acreditado por un certificador de AENOR y por un auditor externo, que levanta el acta y lo envía a la CNMC. El organismo supervisor es el que realiza al menos el 10% de todas las inspecciones a nuestras plantas”.
Además, “los informes anuales verificados por un tercero se realizan siguiendo un procedimiento estándar europeo”, explica el representante del sector, “de hecho la cogeneración es la única tecnología que tiene que entregar un informe de estas características todos los años antes del 31 de marzo, donde aparece el combustible utilizado, la producción, el calor producido, el listado de los sistemas de medición, etc.”.
En los próximos meses el Gobierno anunciará una prórroga pero el sector necesita de un Plan Renove: “Para que la industria pueda invertir en mejores equipos y así mejorar su eficiencia”, apunta el experto, “además entendemos que con el nuevo Plan la retribución será menor que la de hasta ahora al ser industrias más eficientes, es decir, con el mismo combustible generaremos más electricidad y calor, y por último, entendemos que será un proceso de concurrencia competitiva”.
La retribución a la cogeneración está repartida entre la de la inversión y la de operación. Mientras las plantas nuevas cobrarían las dos, el resto solo se le retribuiría por la operación porque se sobreentiende que ya están amortizados. A grosso modo, la retribución más los impuestos representan un coste de 1.000 millones de euros, pero al haberse suspendido el impuesto eléctrico del 7%, se reduce hasta los 700 millones, “pero con el Plan Renove el coste sería aún menor, de unos 600 millones por ser más eficiente”.
¿Qué consecuencia tendría si se obstaculizase el Plan Renove? Para la patronal Acogen, “sería un error cerrar una tecnología tan eficiente y sobre todo porque porque ahorramos mucho en pérdidas de red gracias a nuestras redes de distribución”.
La cogeneración produce el 11% de toda la electricidad del sistema, su industria fabrica el 20% del PIB industrial del país, y sus instalaciones suponen el 25% del consumo total de gas natural.