Desde hace unos años, Nou Onze tiene en sus instalaciones un interesante modelo Porsche 356 Pre-A Súper, de 1954, una unidad llegada a nuestro país a principios de 2000 a través de un aficionado vasco, siendo adquirido poco tiempo después. Lo más interesante de esta versión deportiva 356 pre-A Súper es que desde su origen contaba con un auténtico historial en competición, en concreto en Estados Unidos, por lo que su reconstrucción se realizó desde esta premisa.
El Porsche 356 pre-A Súper de 1954 es la primera generación del 356 y la más deportiva, modelo con claras diferencias respecto a las versiones posteriores, una de ellas el parabrisas de dos piezas separadas por una barra frontal y en forma de V (luna plegada) y el techo, con luneta trasera mas pequeña y motores de 1.300cc y 1.500cc para la versión mas deportiva, que es la que posee Nou Onze. El tablier de estos vehículos es también completamente diferente de los modelos posteriores, además de ser desmontable del chasis. En este tablero lleva una gran radio de válvulas en el centro del tablier, de la marca Telefunken.
Esta unidad pre-A Súper se estrenó en los Estados Unidos y aunque no se sabe muy bien en qué época se convirtió en vehículo de competición. Posee el pasaporte de la SCCA por haber participado en competiciones en EEUU en los años 80 y además durante bastantes temporadas. Fue a principios del año 2000 cuando el coche llega a España a través de un aficionado vasco, quien lo vendió casi inmediatamente a Nou Onze.
Una vez el Pre-A Súper estuvo en Barcelona, Nou Onze se puso a trabajar en el. A lo largo de los años había sufrido transformaciones y preparaciones que no eran adecuadas para correr en Europa. Uno de los objetivos que se marcó para este coche fue el de participar en Le Mans Classic, pero el problema más grande que se presentó es que en América se le habían instalado unos frenos de disco, tanto delante como detrás, y tuvo que sustituirse todo el sistema de frenado para dotarle de los frenos de tambor originales, sustituir manguetas, amortiguadores y bomba de freno.
Se le instaló también un arco de seguridad de seis puntos con homologación FIA, sistema de extinción y demás elementos de seguridad obligatorios para correr en velocidad. Se solicitó el pasaporte FIA, se sustituyeron los carburadores, ya que la FIA pedía carburadores Solex de 40Ø de un solo cuerpo y los que llevaba el coche eran de doble cuerpo. Ese tema llevó varios meses en ser solucionado, hasta que se encontró la pieza correcta en Australia. Una vez terminado el coche con especificaciones FIA y después de realizar algunos test, el coche estuvo listo para correr.
Uno de los aspectos más difíciles de este coche estando a su volante es el de frenar con el sistema de tambor original. Eso es lo que más costó, además también de aprender a aprovechar la potencia que ofrece el motor de 1.500cc y 110 CV.
Carlos Beltrán: “La primera carrera en la que participamos fue en el Le Mans Classic del año 2010, en el que estuve junto a Pablo Tarrero. Repetimos en esta misma prueba en la siguiente edición, dos años más tarde, en aquella ocasión con Pablo Tarrero y Guillermo Velasco. Uno de los circuitos en los que más hemos llegado a disfrutar con este coche es en Pau, por ser un circuito urbano, en realidad casi igual al de los años 50, y por el gran ambiente que siempre hay allí. El Grand Prix de Pau Historique es un gran acontecimiento en el que estuvimos en 2013 y 2016 y en ambos años conseguimos la victoria en el Índice de Performance”.
Curiosamente, pero al hilo de lo que logran disfrutar los pilotos en esta pista, Carlos Beltrán, en compañía de Pablo Tarrero, ha participado con esta magnífica unidad Porsche 356 Pre-A Súper en la versión 2019 del G.P. de Pau.
