Probióticos y prebióticos
Si “somos lo que comemos” es importante saber cómo contribuyen ciertos alimentos a mejorar la salud. Te explicamos cómo funcionan los prebióticos y probióticos, qué los diferencia y de dónde puedes obtenerlos.

Beneficios de los prebióticos para la salud

Raquel Bernácer

Por: Raquel Bernácer

Dietista-nutricionista especializada en cocina vegetal

Actualizado: 22 de septiembre de 2022

Los prebióticos son un tipo de hidratos de carbono que nuestro intestino no puede digerir, y tienen la capacidad de modificar de forma selectiva la flora intestinal, ya que son utilizados por los probióticos como sustrato alimenticio.

De esta forma, favorecen el desarrollo de las bacterias beneficiosas del intestino disminuyendo la cantidad de microorganismos potencialmente patógenos.

PUBLICIDAD

Se encuentran presentes, en cantidades moderadas, en algunos alimentos como plátanos, espárragos, ajo, tomates, puerro, trigo integral, alcachofa, cebollas o achicoria. Gracias a su capacidad para favorecer el desarrollo de las bacterias beneficiosas o probióticos, se consideran un suplemento apropiado cuando es necesario mejorar la flora intestinal.

Alimentos prebióticos

Los más utilizados son los fructooligosacáridos (FOS), la inulina y los galactooligosacáridos (GOS). Existen estudios que han demostrado sus numerosos efectos positivos, como:

  • Estimular el sistema inmunitario.
  • Propiciar el desarrollo de las bacterias beneficiosas de la flora intestinal, y dificultar el crecimiento de las patógenas.
  • Facilitar la absorción de algunos minerales como el calcio y el magnesio.
  • Favorecer la síntesis de ciertas vitaminas.
  • Reducir los trastornos digestivos, como los molestos gases, al ayudar a mantener el equilibrio intestinal.
  • Mejorar la regularidad intestinal, con lo que disminuyen los episodios de estreñimiento.
  • Reducir el riesgo de cáncer de colon y de enfermedad inflamatoria intestinal.

PUBLICIDAD

Cuando las bacterias beneficiosas del intestino utilizan los prebióticos como alimento producen una serie de subproductos, entre los que se encuentran los ácidos grasos de cadena corta (AGCC), que tienen efectos positivos sobre el intestino, ya que las células intestinales los utilizan como nutrientes.

PUBLICIDAD

Creado: 7 de abril de 2011

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD