La mitad de la población de Kiev huyó desde el inicio de la invasión rusa, el 24 de febrero, informó este jueves el alcalde de la capital ucraniana, Vitali Klitschko.

“Según nuestros datos, uno de cada dos habitantes de Kiev dejó la ciudad. Hoy, se encuentran en ella algo menos de dos millones de personas”, afirmó a la televisión ucraniana.

“Kiev se ha convertido en una fortaleza”, dijo Klitschko, dos semanas después del lanzamiento del ataque ruso. “Cada calle, cada edificio, cada puesto de control se fortificó”.

Kiev contaba con 3.5 millones de habitantes antes del inicio del conflicto con Rusia. Según la ONU, más de 2.3 millones de personas han huido de Ucrania en estas dos semanas.

Además, Liudmyla Denisova, encargada de derechos humanos en el Parlamento ucraniano, informó este jueves que al menos 71 niños murieron en Ucrania desde el inicio de la ofensiva rusa el 24 de febrero.

“Desde el inicio de la invasión rusa al 10 de marzo (…) 71 niños resultaron muertos y más de 100 heridos” indicó en un comunicado en Telegram.

Ayer, el bombardeo de un centro médico que albergaba una maternidad y un hospital infantil en Mariúpol dejó tres muertos, uno de ellos una niña, según fuentes municipales.

En Malyn, en el oeste, cinco personas murieron, tres de ellas niños, cuando siete casas fueron bombardeadas, dijo Denisova, que citó varios ejemplos de ataques rusos en los que hubo niños fallecidos.

Con esto, Naciones Unidas tiene ya confirmada la muerte de unos 550 civiles como consecuencia de los combates en Ucrania, aunque la propia organización asume que estos datos serían sólo la punta del iceberg.

El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos cree que la cifra es “considerablemente mayor” a las 1,506 víctimas que tiene registradas, entre las que figuran 957 heridos y 549 muertos. La organización ha explicado que tiene denuncias sin verificar y que hay zonas de las que apenas han llegado datos, como puede ser Mariúpol.

En el marco de estos informes, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, declaró en Varsovia que la OTAN se ha vuelto “más fuerte” y Rusia “más débil”, debido al conflicto en Ucrania.

“La alianza de la OTAN es más fuerte y Rusia es más débil por lo que ha hecho (el presidente ruso Vladimir) Putin”, señaló Harris, mientras que su anfitrión, el presidente Andrzej Duda, denunció la invasión de las fuerzas rusas, que calificó de “barbarie con características de genocidio”.

“Tenemos que salvar a Ucrania”, pidió el jefe de Estado polaco, pidiendo “nuevas sanciones contra Rusia”.

Duda se refirió a bombardeos de instalaciones médicas ucranianas, como el hospital pediátrico en Mariúpol, e informó que hay fiscales de la Corte Internacional de Justicia de La Haya que están actualmente en Polonia recabando pruebas entre los refugiados ucranianos sobre un posible crimen de guerra.

“Creo que su trabajo concluirá con acusaciones serias que traerán consigo condenas para los criminales de guerra”, confió.

Harris también hizo referencia a las “atrocidades inimaginables” de las últimas 24 horas en Ucrania, citando el bombardeo del hospital en Mariúpol, y subrayó que el departamento de Justicia estadounidense creó un grupo de trabajo para investigar las presuntas “actividades criminales” de “instituciones y particulares” de Rusia.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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