En estos días en Twitter un par de veces se conversó sobre la separación de los estados del norte de México, lo que llamaron #Nortexit. Claro está es una acción que constitucionalmente no se puede hacer, pero esta conversación nos hizo pensar en el norteño.
¿Quién es el norteño? Solemos pensar en el norteño como una persona de campo, rural, normalmente en pantalones de mezclilla, camisa a cuadros, con botas y sombrero. Su acento al hablar es golpeado, gusta de la banda, los corridos o simplemente de la música de conjunto norteño; bebe cheve Tecate, todos los fines de semana hace carnea asada, y maneja una pickup, o troca como le llama. Como ex-habitante del norte del país podría decirte que estas características no son una exageración, más hay excepciones a la regla, como en todo… ¡no hay que generalizar!
La diferencia cultural entre el norte, el centro y el sur de nuestro país es un tema frecuente de conversación entre nosotros, que muchas veces deriva en una serie de estereotipos de las personas, como los que mencioné anteriormente. Sin embargo, siempre me ha parecido curioso como hacemos esta segregación y cara de fuchi del norte, la banda, los corridos y las botas, pero cuando estamos fuera del país, en una peda casera ó hasta en las bodas… ¡todos invariablemente cantamos y bailamos a ese ritmo!
Pero no solo eso, no podemos negar que tuvimos una época de Oro de la Banda, el Norteño y la Quebradita en México durante la década de 1990. Cuando Bronco, Caballo Dorado, Mi Banda El Mexicano y otro montón de agrupaciones dominaron las listas musicales de las radios y la televisión. Hasta la Onda Vaselina sacó un disco llamado “La Banda Rock”, y esta música llenó tanto los oídos que el estilo se impregnó en la indumentaria haciendo que todos llevaran botas vaqueras, sombreros y paliacates. Y lo mismo sucedió con la cocina y el resto de estilo de vida. (¡Hasta las novelas tienen sus versiones norteñas!)
Treinta años después el norteño tiene un interesante renacimiento, y muchas de estas grandes bandas ahora encabezan los festivales de música alternativa, que antes estuvieron dominados por exponentes de rock, indie o música electrónica. No solo eso, también las botas vaqueras, el sombrero y algunos elementos de indumentaria han vuelto a nuestro guardarropa; y las carnitas asadas ya sea en casa o en restaurantes especializados en cortes del norte también se han vuelto populares. El norteño ha venido a invadir nuestro día a día y ni siquiera nos habíamos dado cuenta.
Mayo 2020, Edición: El Norteño
Para esta edición de Mayo 2020 de Kä Volta hacemos una revisión histórica de él norteño a través de la música que se hizo popular durante la década de los 90s. También revisamos su estilo de vida, estética, moda y comportamiento, para quitarle el tabú a una parte tan nuestra como mexicanos: el norte.
Al paralelo exploramos otros exponentes, tendencias y estilos de vida que vienen del norte, pero que no necesariamente son el cliché o creencia norteña. Hay mucho terreno e ideas que explorar en esta zona del país. Ya habíamos hecho un acercamiento con la edición “Baja Med, Carta Editorial de Junio 2018”, inspirada en Baja California.
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XOXO
Ana Volta, @anavolta