El cacahuete o maní nació en ciertas zonas tropicales de América. Llegó al Imperio Mexica y en los mercados de Tenochtitlán lo encontraron los españoles, que lo llevaron a España en los siglos posteriores. Los portugueses, a su vez, lo enviaron a sus colonias africanas. Desde entonces, pocos rincones del mundo no lo consumen de una u otra forma. ¿Dudas sobre tu snack favorito o sobre cómo cocinarlo? Aprendemos todo lo imprescindible sobre los cacahuetes a continuación.
Qué es el cacahuete
El cacahuete, cacahuate o maní es una legumbre. De la familia de las habas, guisantes y garbanzos, llamada fabáceas, su nombre científico es Arachis hypogaea. Es una planta que crece en climas cálidos. Entierra sus tallos al marchitarse y esto hace que sus semillas crezcan bajo tierra: esas semillas son los cacahuetes. Este fenómeno no es nada común en la naturaleza, lo que convierte a estas legumbres en extraordinarias. El enterramiento de sus semillas fue considerado por las culturas que las descubrieron como una conexión con el inframundo. Los altares del Día de Muertos en México se llenan de maní para ofrendar a los antepasados.
Algunos expertos sitúan su nacimiento en el actual Brasil, aunque lo único que se sabe con certeza es que su origen es la América tropical y subtropical. Desde Sudamérica alcanzó la antigua Tenochtitlán (capital del Imperio Mexica). Los españoles lo descubrieron en un mercado de esa ciudad y empezaron a exportarlo, lo cual contribuyó a su expansión posterior por el mundo. Según está documentado, la persona que introdujo esta legumbre en España fue Francisco Fabián y Fuero, arzobispo de Valencia entre 1773 y 1795 y personaje destacado de la Ilustración Española. Fue también obispo de la ciudad mexicana de Puebla, lo que le permitió conocer de primera mano muchos alimentos de ese país. No existe constancia de que esta planta se hubiera cultivado en nuestro país antes de que lo hiciera el arzobispo en Puzol para adornar su jardín. Por su parte, los portugueses lo llevaron a sus colonias africanas, donde se volvió tremendamente popular y aún hoy es parte de la tradición culinaria de varias zonas de África.
La palabra cacahuete procede del vocablo náhuatl (lengua mexica), “tlalcacáhuatl”, que significa “cacao de la tierra”. En español puede denominarse de varias formas. En México los llaman cacahuates, con esa "a" en medio. Sus principales productores en la actualidad son China y la India. En tercer lugar está Estados Unidos, que lo usa mayoritariamente para la fabricación de mantequilla de cacahuete.
Beneficios y propiedades del cacahuete
Para empezar a detallar sus principales propiedades hablaremos de las proteínas. Cien gramos de cacahuetes tienen 26 g de proteína, la carne de ternera tiene 24 g... Poco más que añadir, queda claro que son una fuente proteínica vegetal y de buena calidad. Estas proteínas son ricas en arginina, aminoácido que interviene en la producción de la hormona del crecimiento.
Los cacahuetes también aportan una enorme cantidad de vitamina B3 y solo un puñado en la mano (unos 30 g) nos proporcionan la cuarta parte de la cantidad diaria recomendada. Sus grasas son principalmente monoinsaturadas, lo cual ayuda a controlar el colesterol y en general reduce el riesgo de problemas cardiovasculares.
Otro beneficio destacable es su contenido en triptófano. Es otro aminoácido esencial que el cuerpo no fabrica, por lo que debe obtenerse a través de la alimentación. Actúa como un ansiolítico suave y conciliador del sueño. Y estos son solo los más destacados efectos útiles de los cacahuetes…
Contraindicaciones del cacahuete
Las contraindicaciones de los cacahuetes pueden resumirse en tres factores, principalmente: las alergias, su cantidad de grasa y la indigestión que puede provocar por las aflatoxinas (toxinas presentes en ciertos hongos). Pero no vayamos a asustarnos. En general, es un alimento seguro.
Empecemos por las alergias y es que es uno de los alérgenos alimentarios más importantes del mundo. Paradójicamente, su amplio consumo es lo que ha disparado el nivel de reacciones alérgicas que producen. Puede padecer esta alergia cualquier persona, pero es muy frecuente en niños atópicos, por eso es importante detectarla desde la infancia y no introducir este alimento demasiado pronto en la comidas para los niños. En las personas afectadas causa una reacción que puede ser muy grave. Es fundamental por este motivo que en los envasados y en los restaurantes venga bien especificado si los productos o recetas llevan cacahuetes o si pudiera existir contaminación cruzada. Ciertamente es un asunto de salud importante para los alérgicos. No obstante, debemos tener en cuenta que solo el 0,5% de la población mundial padece esta afección, por lo que en este sentido es seguro tomarlos para la mayoría de los consumidores.
El segundo problema con los cacahuetes es que contienen una enorme cantidad de grasa. Y sí, sabemos que es una grasa vegetal saludable, como hemos mencionado en el apartado anterior al repasar sus beneficios y propiedades. Sin embargo, 100 g de esta delicia adictiva aportan 567 calorías. Los nutricionistas recomiendan no más de 20 al día, unos 30 g, y ya sabemos que muchos de nosotros no soltamos la bolsita de cacahuetes hasta acabarla. Por otro lado, es habitual que se envasen fritos y con mucha sal. Como habrán adivinado lo mejor es consumirlos crudos. Además no es buena idea comerlos cada día, y aquí vamos a por el siguiente problema con este alimento: la indigestión y los gases. Recordemos que no es un fruto seco, es una legumbre, y estas tienden a provocar ligeros problemas de indigestión, diarrea y gases, especialmente si se toman en demasía. Por lo tanto, por su nivel de grasa y para evitar posibles indigestiones, lo más adecuado es tomar unos 20 g o menos en crudo y solo algunas veces por semana.
Y ahora vamos a hablar de las aflatoxinas. Se trata de una toxina natural de algunos hongos que contaminan los campos agrícolas, como los cultivos de cacahuetes. Los controles sanitarios rigurosos en la mayoría de los países, incluido España, impiden la acumulación de dichas toxinas. Así que si compramos nuestros cacahuetes en el supermercado o mercado y en puestos de confianza no habrá mayor asunto del que preocuparse. Tras esto podemos preguntarnos…
¿Son malos los cacahuetes?
Los cacahuetes son alimentos con muchas y reconocidas propiedades, como hemos visto, en especial por su cantidad de proteínas y su grasa cardiosaludable. No representan peligro alguno para la mayoría de los consumidores. Y los que compramos en nuestros establecimientos han pasado controles que garantizan su consumo. Solo deben tener cuidado con ellos los que padezcan alergia a esta legumbre o sospechen que la padecen. También los que quieran controlar el peso, ya que son tremendamente calóricos. Y también las personas que toleran mal las digestiones con legumbres, puesto que los cacahuetes lo son. Moderación es la palabra clave con respecto a los cacahuetes. Si lo tienes en cuenta, podrás disfrutarlos sin remordimientos.
Recetas con cacahuete
No se puede comenzar este apartado sin poner tres palabras en la primera frase: crema de cacahuete, también llamada mantequilla o manteca de cacahuete. Es la estrella de las recetas con este alimento. Fácil, muy nutritivo, sabroso y adictivo. Todo lo que necesitamos son cacahuetes tostados al natural y una pizca de sal. Batimos y ya tenemos nuestra crema lista para untar o añadirla al yogur o los cereales del desayuno. Igualmente puedes agregarla en multitud de recetas dulces: helados, masas horneadas como galletas o bizcochos. Además sirve para salsas y vinagretas. En platos al wok queda estupendamente. Aporta un extra de sabor a carnes y purés.
Por otro lado, los cacahuetes son un ingrediente tradicional en algunas cocinas del mundo. En España es un snack o aperitivo común, sin embargo en otros lugares del mundo ni siquiera lo consumen de esa forma y lo usan como ingrediente fundamental de algunas recetas populares. El pollo satay de Indonesia, los fideos de Sichuan y su pollo Kung Pao o la calabaza con cacahuetes de Tanzania son buenos ejemplos. Solo te queda comprar un buen puñado de cacahuetes frescos y probar alguna de estas delicias.
